En Virrey del Pino, Km 41,700 de la ruta 3 se realizó un hecho que es la culminación de una acción de dos meses. Gustavo Moscona trabaja con elementos de la herencia del teatro situacionista. La comunidad barrial tiene una participación importante en la preparación del hecho que se anuncia como una obra de teatro. Esta obra aborda problemas cercanos de la comunidad y problemas fuertes, pero mezclando con un tipo de humor que incorpora elementos del sentido común massmediático. Esta vez la obra tenía como eje el Delivery en el que hilador es un repartido de pizza del barrio. La primera escena muestra una pareja joven, la chica embarazada. Un hogar de clase media baja de La Matanza que en una noche en la que recuerdan su asistencia a los recitales con nostalgia piden una pizza. Luego de que llega el delivery tocan nuevamente a la puerta y el que entra ahora es un muchacho con odio de desplazadao del mundo. Mata al muchacho para que la chica se acuerde siempre de él. Para ser alguien en un mundo que lo pone siempre en el lugar de nada, de desperdicio. Los asistentes se incomodan, los chicos se rien porque el que hace de asesino, lo hace naturalmente como cualquiera de los muchachos del barrio que un día un poco locos mataron o casi mataron a alguien. Los más integrados vivieron situaciones parecidas como víctimas o todo el tiempo imaginan, con fundamento que pueden vivirlas. Claro, luego hay una escena en la que una mujer pide dos taxis boys y todos se rien mucho mientras transcurrenuna serie de peripecias exageradas ex professo, escapando de la entrada molesta. Varias cosas más, pero lo que se puede percibir siempre en las obras de Moscona es una implicación-conmoción de una sala siempre repleta en la que se mezclan chicos de la escuela, vendedores de droga barata, el dueño de un kiosco, el colectivero de la línea 88, el changarín del mercado central. Para todos ellos, esto es arte, una forma de arte que anda muy entremezclada con eso que llamamos vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario